000 03030nam a22003017a 4500
999 _c12080
_d12080
003 BMVLl
005 20220621154958.0
008 220610t1983 spa |||g |||| 00| p spa d
020 _a84-86232-01-5
040 _aBMVLl
_bspa
041 _aspa
082 _a868.6
_bG237
100 1 _911898
_aGarcía López, Ángel,
_d1935-
245 1 0 _aMemoria amarga de mí
_cÁngel García López
250 _a1a ed.
260 3 _aMadrid :
_bEdiciones Al batros,
_c1983.
300 _a92 p. ;
_c22 cm.
505 2 _aEsta noche decido tener contigo un libro - Este libro no tiene propósito más cierto que saldar de un regalo - recuerdas cómo el duelo más grande de mi vida fue creer no habría vuelta de aquellas consunciones a las que tu pusiste más una enfermería - Si se puede mi vida dividir en porciones - Cuando todo está a punto de no ser ya otra cosa que esto bello que eres - Hemos de ser felices el tiempo que nos quede, no sé cuanto, amor mío - De los libros escritos me arrepiento de todos, porque en verdad debiera sólo haber hecho éste - El cuerpo tuyo crece, cada vez es más alto - Cuando no estás presente, celebro que no existas - Pensar que el verso último es aquel que te escribo me convierte en un niño dado al desvalimiento - Cuando yo era más joven que tú misma ahora eres - El tiempo aquel tenía las mismas correcciones que una página en blanco - Tengo que darme prisa, puesto que sé me queda poco papel y tiempo - A mitad de la tarde no soy yo, se oscurecen y se manchan mis ojos - Otra vez el cartero ha subido con libros y ha dejado en tus manos de ese robo del tiempo -. Quisiera estar aún vivo - Debo contarte ahora que aquella vez estaba -pienso yo- enamorado - Te diré alguna vez encontrar dónde el árbol que conserva tu nombre - Mañana tengo examen y sé muchos alumnos envejecen de estudio, pero no haré otra cosa que pensar si me quieres - Como el sol a la noche, tú vas hacia le milagro - Bien me sé esta premura de decirme a diario que sin ti no soy nada - Los domingos mis ojos suelen ser más lejanos - Contigo vi viudades que, nunca conocidas, sedujeran sus nombre - A veces me interpongo frente a mí, como un muro , y busco responderme si en verdad te merezco - Esta tarde, no hay duda, está bien empleada - El día siete de entonces estaba yo muriendo sin saber que tu estabas sólo a un paso del mío - Somos como quien mira, todo el mar y se encuentra que no es suyo el paisaje - Pensar no pude nunca que un puñado de metros separar tanto hubieran - Al mirarte estoy triste más que todas las veces - Nunca debiera, amiga darle fin a este libro que has escrito conmigo.
586 _aPremio "Antonio Camuñas", 1982.
648 4 _92114
_aSiglo XX
650 1 4 _98
_aLiteratura española
650 1 4 _92850
_aLiteratura hispanoamericana
650 2 4 _92128
_aMemorias
900 _c27/05/2021
_eDonación
_gXimena Salazar Lostaunau
910 _aFany SAAVEDRA HIDALGO
_c2022-06-10
_b13
911 _b13
_aFany SAAVEDRA HIDALGO
942 _2ddc
_cLIBRO