"Lucio Bordenave, un empleado de banco dejado cesante y ahora relojero, lleva una apacible existencia en su casa del barrio porteño de Villa Urquiza. Repentinamente -y quizá sin causas demasiado precisas o justificadas- su mujer, Diana ("la señora"), es internada en un inquietante "Instituto Frenopático". A partir de aquí, la vida del rutinario y convencional relojero se ve envuelta en una inverosímil y apenas créible serie de pericpecias: la intrusión de su cuñada, las entrevistas que mantiene con el envolvente doctor Reger Samaniego, director del Instituto, la aparición de una perra, sugestivamente llamada también Diana, la progresiva concienica de que en torno de él se producen extraños trasvasamientos y mutaciones de almas y de cuerpos. Dos rasgos deben destacarse en Dormir al sol: el humor, inseparable en la descripción de los personajes, constante en las conversaciones y alternativas que ellos portagonizan; y la tantas veces probada capacidad imaginativa del autor para crear situaciones que penetran en el terreno de las más alta y alucinante fantasía." contraportada